Para todos aquellos que no lo saben, el servicio sexual de sumisión consiste en una variable de sadomasoquismo en el que un hombre ejerce poder sexual sobre una chica, en este caso una escort de lujo en Barcelona. En esta secreta práctica existen dos roles posibles: los sumisos y los dominantes. Aunque en este servicio sexual en concreto, la sumisa será la escort y responderá a todas las tus órdenes, instrucciones y fantasías que pasen por tu retorcida cabeza.
En ocasiones para practicar la sumisión no es necesario el contacto físico. Esto es debido a que los juegos, las órdenes, posturas, silencios, etc., juegan papel prioritario donde el contacto físico no es imprescindible. Aunque si al finalizar la práctica de sumisión, el cliente quiere coronar la cita con la escort, pueden tener sexo como se tiene habitualmente.
Recordad que en el juego de la sumisión se pueden añadir juguetes eróticos como látigos, mordazas, kits bondage, esposas, collares, etc. No son imprescindibles para la sumisión, pero hacen que la práctica del sado Sumisa sea más real y satisfactoria para las personas que la practiquen. Y si el cliente no dispone del material necesario, nuestras escorts de lujo tienen su maleta extra para este tipo de prácticas sexuales.
Todas las escorts de nuestra agencia que practican este servicio sexual lo hacen libremente porque encuentran mucho placer en la sumisión y lo practican de manera natural.
En esta práctica es normal usar látigos, mordazas, kits bondage, esposas, collares, etc. Y no te reocupes si no dispones de este material. Nuestra escort posee todo el repertorio.
El juego de sumisión es muy excitante, pero cuando tienes todo un aren de escorts sumisas a tu disposición pendientes de tus necesidades sexuales y órdenes, es legendario.
Hablar de todos los servicios que realiza una escort sumisa es un poco complicado; ya que las sumisas sexuales sienten placer cediendo el control durante el sexo o cuando hay alguna finalidad sexual. Es decir, las prácticas sexuales que se pueden realizar en el BDSM son prácticamente infinitas. Aunque como es normal, cada escort sumisa tiene sus preferencias y límites; sin embargo, todas ellas tienen en común lo mismo y es que disfrutan del sexo sin límites y sin tabues.
También existen las sumisas masoquistas que, como su nombre indica, disfrutan recibiendo dolor físico moderado. Dejando a un lado el placer sexual de la penetración y centrándose principalmente en la humillación verbal, física, la degradación y la tortura. En conclusión, su dominante ideal es un sádico completo. Y también están las prácticas del BDSM, que consisten en aquellas personas a las que les gusta ser atadas. Realmente sienten excitación de estar inmovilizadas y a la merced del dominante. Durante un tiempo limitado le otorgan control total de su cuerpo a una persona que puede manipularlas a placer y atarlas sin límite.